Beneficios y riesgos de la tecnología en seguridad
El avance de la tecnología promete mejorar la seguridad laboral, pero también trae riesgos que requieren un enfoque basado en evidencia para proteger a los trabajadores.
La expansión acelerada de tecnologías digitales como la inteligencia artificial y los dispositivos portátiles está transformando los entornos laborales y plantea tanto oportunidades como desafíos para la seguridad y la salud en el trabajo. Según el informe The impact of emerging technology on safety at work, elaborado por el Global Safety Evidence Centre de la Lloyd’s Register Foundation, un enfoque basado en la evidencia es fundamental para navegar esta transición sin comprometer la innovación.
Nancy Hey, directora de evidencia y análisis de la organización, señaló que las nuevas tecnologías introducidas con fines empresariales pueden traer consigo riesgos, pero también ofrecen herramientas para proteger a los trabajadores. Recordó que a lo largo de la historia se han producido múltiples transiciones tecnológicas rápidas que se hicieron más seguras gracias a la identificación temprana de retos y a los esfuerzos colectivos por abordarlos, lo que genera confianza en el cambio. De acuerdo con Hey, la investigación coordinada y sustentada en ciencia de la seguridad es esencial para que la innovación tecnológica se desarrolle de manera eficaz y segura.
El estudio, realizado por RAND Europe, analizó la evidencia existente sobre la interacción entre tecnologías emergentes y seguridad laboral. Los hallazgos muestran que la información es todavía fragmentada y que se conoce más sobre el impacto de algunas tecnologías que de otras. Por ejemplo, las aplicaciones móviles centradas en seguridad pueden ayudar a los gestores a priorizar la prevención, fomentar hábitos saludables en los trabajadores y mejorar su bienestar, aunque la evidencia sobre su efecto en el rendimiento o en las tasas de ausentismo sigue siendo mixta.
En el caso de la realidad aumentada y virtual aplicada a la capacitación, se observan beneficios en el nivel de compromiso de los trabajadores y en su motivación para aplicar lo aprendido, aunque los resultados respecto a la mejora real del conocimiento en seguridad son contradictorios. Tecnologías de gestión algorítmica o inteligencia artificial emocional, por su parte, pueden tener efectos negativos en la salud y las relaciones laborales. El informe documenta situaciones en las que empleados suprimieron sus emociones para proteger su privacidad y percibieron estas herramientas como una señal de desconfianza por parte de sus empleadores. Sin embargo, se advierte que con un diseño adecuado y procesos de implementación colaborativos, esos riesgos podrían reducirse.
Los dispositivos portátiles, que registran datos de salud y riesgos ambientales, representan otro ejemplo de beneficios y riesgos en simultáneo. Dependiendo de su uso, pueden generar tanto un aumento del estrés como una falsa sensación de seguridad. Los robots colaborativos, diseñados para trabajar junto a las personas en entornos de manufactura, también ofrecen ventajas potenciales, aunque requieren más evidencia sobre cómo integrarlos de manera segura en las líneas de producción ya existentes.
Para la investigadora Magdalena Soffia, del Institute for the Future of Work, el informe llega en un momento decisivo. En su opinión, muchas industrias adoptan nuevas tecnologías con una fe excesiva en sus capacidades técnicas, cuando en realidad los efectos sobre la salud y seguridad de los trabajadores dependen de cómo se diseñen, desarrollen e implementen. Recalcó que gobernar y regular estas tecnologías no solo implica habilitar el crecimiento y la creación de valor, sino también anticipar y mitigar riesgos que afectan directamente al recurso más importante: la fuerza laboral.
Los mapas de evidencia creados por el Global Safety Evidence Centre se presentan como una herramienta clave para dar seguimiento al impacto de estas tecnologías sobre la seguridad y la salud en el trabajo a lo largo del tiempo, y también para guiar evaluaciones previas a realizar inversiones significativas en nuevas soluciones.