Equipo de protección personal para un lugar de trabajo en constante evolución
El EPP actúa como la última barrera cuando los peligros no pueden eliminarse. Elegirlo según los riesgos, usarlo correctamente y capacitar de forma continua refuerza la seguridad y la salud en todas las operaciones.
Eliminar los riesgos es siempre la prioridad. Aun así, en actividades de alto peligro, el equipo de protección personal (EPP) suele ser decisivo. Pensemos en el operario que evita un impacto porque el chaleco reflectante de su compañero lo hizo visible en un turno nocturno. Desde prendas de alta visibilidad que ayudan a prevenir atropellos, hasta cascos que protegen la cabeza o guantes que reducen cortes, el EPP no es un trámite: es una defensa que, todos los días, ayuda a evitar lesiones y eventos graves.
Cada año, alrededor de tres millones de personas fallecen por accidentes y enfermedades relacionadas con el trabajo*, lo que sitúa a la seguridad y salud en el trabajo (SST) como un factor esencial para cualquier organización. En construcción, industria o laboratorios, el EPP actúa como escudo cuando los peligros no pueden eliminarse por completo.
A pesar de avances técnicos y regulatorios, en muchas empresas el EPP aún se percibe como secundario o incómodo. El reto no es solo proveerlo, sino consolidar una cultura en la que la seguridad tenga el mismo peso que la producción.
*Fuente: OIT, noviembre de 2023.
¿Qué es el EPP y para qué sirve?
El EPP es fundamental para proteger a las personas frente a diversos peligros, como:
- Polvos, neblinas o gases nocivos.
- Impacto por caída de objetos o proyección de partículas.
- Salpicaduras de sustancias corrosivas.
- Exposición cutánea a químicos peligrosos.
- Ruido dañino.
- Calor o frío extremos.
Como pilar de la SST, funciona como última línea de defensa cuando otras medidas (eliminación o sustitución del peligro, ingeniería, procedimientos, formación y señalización) no bastan.
Tipos de EPP
La selección parte de una evaluación de riesgos. Cada lugar de trabajo requiere protección acorde con sus peligros específicos. Entre los principales tipos se incluyen:
- Protección ocular y facial: gafas, visores y máscaras de soldadura.
- Protección de la cabeza: cascos para riesgos de caída de objetos o trabajos con peligros superiores.
- Protección corporal: trajes químicos, ropa térmica y prendas reflectantes para derrames, temperaturas extremas o tránsito.
- Protección de manos y pies: guantes, botas con puntera y calzado antideslizante.
- Protección respiratoria: mascarillas y equipos de respiración autónomos frente a polvo y gases tóxicos.
- Protección auditiva: tapones y orejeras para reducir la exposición al ruido.
Antes de recurrir al EPP, conviene recordar que no es una solución por sí sola: complementa otras medidas de control.
Categorías de EPP
Según el tipo y la gravedad del riesgo, el EPP se clasifica en tres categorías:
- Categoría 1: para riesgos menores y lesiones superficiales (p. ej., impactos leves, vibraciones o abrasiones). Ejemplos: guantes de trabajo, lentes de seguridad, tapones auditivos conforme a norma.
- Categoría 2: para peligros que pueden causar lesiones serias, sin comprometer la vida. Ejemplos: guantes resistentes a cortes, calzado reforzado, gafas de protección.
- Categoría 3: para riesgos que amenazan la vida o pueden generar daños irreversibles (p. ej., ambientes extremos o caídas de altura). Ejemplos: sistemas anticaídas, trajes para materiales peligrosos, protección respiratoria específica.
¿Cuándo usar EPP?
El EPP reduce la exposición a peligros físicos, químicos, ergonómicos o biológicos. No elimina el riesgo, pero puede disminuir de forma importante la probabilidad de daño (por ejemplo, la protección auditiva si se usa correctamente).
Debe emplearse:
- Como medida temporal mientras se implementan controles permanentes.
- Cuando otras medidas no son viables o resultan insuficientes.
- En tareas como mantenimiento, limpieza o reparación en las que los controles existentes no aplican.
- En emergencias, cuando se requiere protección inmediata.
Cómo hacer que el EPP funcione
Cuando la evaluación de riesgos determina su necesidad, la empresa debe proveer EPP conforme a las normas aplicables y capacitar en uso, cuidado y almacenamiento. Esa formación debe documentarse y repetirse periódicamente.
Puntos clave:
- Definir requisitos de EPP: identificar peligros (p. ej., derrames químicos, caída de objetos) para determinar el equipo necesario.
- Elegir equipos de calidad y buen ajuste: no existe “talla única”; el EPP debe adaptarse a cada persona.
- Mantener estándares estrictos: reemplazar de inmediato equipos dañados o gastados e integrar su uso a la cultura de trabajo.
- Asegurar disponibilidad sin costo para el trabajador cuando corresponda.
- Capacitación y práctica periódicas: directrices claras y accesibles.
- Fomentar la comunicación: promover que el personal comunique dudas o mejoras.
- Actualizar protocolos de SST: revisar procedimientos ante nuevos riesgos o cambios normativos.
Cultura de seguridad
Una cultura fuerte se sustenta en una estrategia integral de SST y en una política clara de EPP. Las directrices deben indicar qué equipamiento corresponde a cada función y cómo usarlo. La estrategia de SST aborda el conjunto del sistema de seguridad y salud. Integrar el EPP de forma constante en las operaciones ayuda a prevenir incidentes y refuerza el bienestar en toda la organización.
¿Cómo medir el desempeño del EPP?
Es esencial verificar:
- Cumplimiento de normas de seguridad aplicables.
- Ajuste adecuado que permita comodidad y movilidad.
- Durabilidad y mantenimiento con uso real y revisiones periódicas.
- Pruebas en condiciones reales y retroalimentación del personal, especialmente en entornos de alto riesgo.
Las normas ISO establecen criterios de desempeño y métodos de ensayo para distintos EPP, aportando consistencia en calidad y fiabilidad. Dentro de un enfoque de gestión de riesgos, ISO 45001 destaca el papel del EPP como última barrera una vez aplicados otros controles.
Referencias citadas en el contenido original:
- ISO 45001:2018 Sistemas de gestión de la seguridad y salud en el trabajo.
- ISO 13688:2013 Ropa de protección — Requisitos generales.
- ISO 16321-1:2021 Protección ocular y facial para uso ocupacional — Parte 1: Requisitos generales.
Mirada a futuro
La evolución del EPP está marcada por soluciones de alto desempeño, más sostenibles y con mayor componente tecnológico, que buscan mejorar la protección, el confort y la eficiencia. Entre los avances descritos se incluyen materiales con menor impacto ambiental, equipos reutilizables, tallajes que consideran distintos tipos de cuerpo, sensores integrados y tecnologías ponibles para monitoreo y apoyo en tiempo real.
Seguridad como ventaja
Proveer el EPP adecuado y usarlo de forma correcta demuestra compromiso con la gente y con la SST. Además de reducir riesgos, fortalece la confianza interna y aporta reputación de responsabilidad y solidez. En última instancia, el EPP expresa un compromiso constante con el cuidado de las personas y con la continuidad del trabajo en condiciones seguras.